Brotó el estiércol panista en el Palacio de Justicia, cuando a las oficinas de Fiscalía en Tamaulipas, llegó la Juez de Control Rosa María Rodulfo Arcea y agredió a cachetadas a Dámaris Rojas Lucio, titular del Órgano Interno de Control y cuñada de Irving Barrios Mojica, por ser la amante de su esposo, Jorge Ernesto Macías Espinoza, jefe de la Comisión de Búsqueda de desaparecidos en Tamaulipas.

Delante de fiscales, secretarios, ofendidos que declaraban sus problemas y personal de intendencia, la matamorense Rosa María, le gritó a Dámaris, según el parte oficial de los ministeriales que escucharon de viva voz:

“hija de tu puta madre, te voy a partir la madre no sabes con quien te metes, te voy a destruir con el grupo de Morena, yo soy Jueza de control y tengo fuero, me voy a encargar de que te corran, y a tus hijas las haré pedacitos igual que a tu familia”.

La Jueza de Control, Rosa María Rodulfo cobró notoriedad, cuando fue exhibida en tres mantas colocadas en diferentes puntos de Ciudad Victoria en mayo de 2022, que se leía ayudó junto con el fiscal Antonio Omar Fernández Muñoz, a que recuperaran su libertad tres individuos que pertenecían al crimen organizado de Tamaulipas, que al salir del reclusorio fueron secuestrados y desaparecidos:

A La Opinión Pública:

“Estamos cansados de funcionarios corruptos que anteponen sus intereses personales a su deber como autoridad, hoy es el caso del lic Antonio Omar Fernandez Muñoz agente del mp y lic Rosa María Rodulfo Arce “juez de control” que dejaron libres a integrantes del “cartel del noreste zetas”.

En las mantas instaladas en diferentes puntos de Ciudad Victoria, redactan los mismos mensajes, con las imágenes amplificadas de los funcionarios de justicia en Tamaulipas:

“Fueron detenidos con armas de fuego, drogas y que dispararon a los policias que los persiguieron, eso sin importarles que se trata de lacras que vienen a lastimar a nuestra sociedad y a robar nuestra tranquilidad”.

Pero a la panista Juez de Control Rosa María Rodulfo, nadie le llamó la atención, ni siquiera por curiosidad le preguntó David Cerda Zúñiga, que por un año estuvo trabajando como jefe de oficina del entonces gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca, hasta que lo designó Magistrado Presidente del Supremo Tribunal de Justicia en Tamaulipas y sigue operando:

“Cómo es posible que estos funcionarios (Omar y Rosa María Rodulfo) apoyen a quienes son conocidos por las masacres que han perpretado, muy pronto se les olvidan los niños, ancianos, y mujeres que siendo inocentes fueron asesinados por estos delincuentes. exigimos la renuncia de estos funcionarios que prefieren ganar dinero sin importarles dañar nuestra comunidad”, finaliza el texto de la manta.

El idilio amoroso entre los funcionarios de la administración de justicia en Tamaulipas, comenzó en febrero de 2019, en el Pleno del Congreso del Estado, los diputados panistas en su mayoría junto con Leticia Sánchez, ahora morenista, nombraron con 27 votos a favor a Jorge Macías, como titular de la Comisión de Búsqueda de desaparecidos en Tamaulipas.

La Comisión como hasta ahora, sigue sin funcionar y claro Jorge Macías se las da de dandy, de rompe corazones, por eso ni caso le hace a la gente, que desilusionada por tantas largas y vueltas terminó por odiarlo, por eso en 2022 presentó su renuncia pero nunca le fue aceptada por su cuñado postizo, el Fiscal de Justicia, Irving Barrios Mujica, a petición de Damaris, su cuñis.

Cúpido hizo que los corazones melosos, ardientes, sedientos de amor, estallaran el 30 de enero de 2020, porque sin que nadie sospechara, los diputados panistas designaron a Damaris Rojas, como jefa del Órgano Interno de Control de la Fiscalía General de Justicia del Estado a petición de su cuñis Irving y agárranse.

En poco tiempo estallaron entre las llamas del deseo, una novela de Corín Tellado era un cuento infantil, Jorge Macías, adelgazó, corría por las mañanas para mantenerse atlético, se hizo pupilentes, poco a poco las agarradas de mano, los guiños y toda la Fiscalía se dio cuenta, menos Rosa María con los cachos bien puestos.

Pero la noche del 1 de marzo, a la Juez Rosa María le confirmaron que su amorcito Jorge salió de un discreto hotel con Dámaris y sin diligencias judiciales, por eso se alteró, tomó su coche y llegó las instalaciones de la Fiscalía bien caliente del coraje.

Fue directo a la oficina de Dámaris sin anunciarse y la pescó bostezando, se hizo el intercambio de palabras, pero todo el personal les puso atención, sobre todo cuando Rosa María, la violentó, la rasguñó, la jaloneó, en repetidas ocasiones la golpeó y de pilón la escupió, enseguida lanzó la amenza de muerte y se fue echando espuma por la boca.

Fue Dámaris con el Médico Legista para que evaluara las lesiones, aquí nada de darle para la gasolina, hacer un oficio, firmarlo el Ministerio Público, sacarle copias, luego que el perito se fue a la cena, que al rato regresaba, nada, fue atendida de inmediato.

Presenta Dámaris, moretones irregulares en hombro izquierdo y derecho. El informe de los agentes castigados, pero adscritos a la seguridad perimetral de la Fiscalía, hicieron referencia a que la agresora se identificó como Juez de Control (a gritos).

Redactaron oficialmente, que al acudir a atender el llamado de lo que ocurría en las oficinas de la Fiscalía, encontraron que Rosa María se encontraba discutiendo con un hombre y que al notar su llegada, subió a un vehículo y se retiró del lugar, pero nadie la siguió.

Enseguida se lee en el pésimo relato policíaco:

“Observamos que un vehículo en color blanco se dirige a la salida, por lo que le marcan el alto y este acelera, observando que es la femenina que había ingresado minutos antes y que reconocen como esposa del licenciado Macías, quien está en búsquedas del Gobierno del Estado”.

La autoridad -tampoco relatan quién-, inició una carpeta de investigación por los delitos de lesiones dolosas, amenazas y delitos Cometidos contra Servidores Públicos. (sic)

El remate del informe es de risa:

“Además estamos en espera de una radiografía para definir si existe algún esguince, lo que podría cambiar la clasificación jurídica de las lesiones”.

Hasta ahora nadie ha emitido alguna declaración, porque los panistas Irving Barrios, Fiscal de Justicia y David Cerda Zúñiga, Magistrado Presidente del Supremo Tribunal de Justicia en Tamaulipas, están empeñados en perjudicar al gobernador morenista Américo Villarreal Anaya.