Aunque después de cuatro años el grupo Hércules, formado por la entonces alcaldesa, […]
Aunque después de cuatro años el grupo Hércules, formado por la entonces alcaldesa, Norma Leticia Salazar Vázquez, Lety, en la recomendación 77/2017, emitida por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) por desaparición forzada, detención arbitraria y ejecución de Érica, Alex y José Ángel Alvarado Rivera, de Control, Tamaulipas y su amigo José Guadalupe Castañeda, se hizo una recomendación al entonces gobernador panista Francisco Javier García Cabeza de Vaca, se rió, pero la justicia nunca llegó y ya han pasado 14 años.
Raquel y Pedro Alvarado, junto con familiares y amigos, se presentaron debajo del Puente Internacional Tratado de Libre Comercio-Lucio Blanco la mañana del 11 de mayo, exigiendo justicia por el homicidio de sus hijos, señalando a la panista Lety Salazar, esa que dijo la candidata a la presidencia de México, Xóchitl Galvéz, “es muy chingona”.
Desde el 13 de octubre que presuntamente, Los Hércules, asesinaron a los tres jóvenes, la justicia nunca se ha hecho efectiva, se protegió a Lety Salazar, que el ex zar antidrogas, Raúl Ramírez, decidió pasar por alto la acusación de desfalco al erario de Matamoros, cuyo delito ya prescribió, por eso pudo ser candidata elegible.
Cuando en 2017 Cabeza de Vaca aceptó la recomendación, la primera acción que se hizo, fue la designación del Enlace del Gobierno del Estado con la CNDH para dar seguimiento al cumplimiento de los puntos recomendados, con lo cual se da total observancia al resolutivo, pero nunca se supo nada.
La burla fue que se giró oficio a la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, para que impartiera a Los Hércules comisionados en Matamoros, el curso en materia de Derechos Humanos con énfasis en las disposiciones de la Ley General en materia de Desaparición Forzada, Desaparición cometida por Particulares y del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas y se envíe a la CNDH la constancia que acredite su cumplimiento.
Se instruyó al elefante blanco, Comisión Estatal de Atención a Víctimas, haga las gestiones necesarias para la identificación e inscripción de los ofendidos indirectas en el Registro Nacional de Víctimas y puedan acceder al Fondo de Ayuda, Asistencia y Reparación Integral, pero nada hicieron.
Los investigadores de la CNDH determinaron que funcionarios de Matamoros, elementos de la Marina Armada y policías estatales y federales mintieron en sus declaraciones con el fin de encubrir los asesinatos de Los Hércules, según un reporte difundido.
Érica, Alex y José Ángel Alvarado Rivera con José Guadalupe Castañeda desaparecieron el 13 de octubre de 2014 cuando visitaban a su padre en Control, una población cerca de Matamoros, limítrofe con Brownsville, Texas.
La CNDH dijo en un comunicado, que la última vez que se vio a los cuatro jóvenes con vida, fue cuando los tenían cautivos los infantes de Marina y la unidad Hércules, que proporcionaba seguridad para Lety Salazar, quien en ese momento era alcaldesa de Matamoros.
De acuerdo con el reporte, los nueve miembros de Los Hércules técnicamente pertenecían a la policía estatal de Tamaulipas, pero respondían únicamente a la alcaldesa y sus allegados.
La ciudad les proporcionó equipamiento y pagaba parte de sus salarios, e incluso les dio uniformes especiales y un logotipo no relacionado con la policía estatal, se detalla en el documento.
Testigos dijeron a los investigadores que las cuatro víctimas estaban en un puesto de tacos debajo de un puente carretero alrededor del mediodía cuando llegaron los elementos de la Marina y de la unidad Hércules.
En cierto momento, una caravana de vehículos de la ciudad también se detuvo en el lugar. La alcaldesa había asistido horas antes a un evento en Control, donde repartió tenis.
Las cuatro jóvenes fueron subidas a los vehículos que se alejaron del lugar, indicaron los testigos:
“De la detención que servidores públicos de la SEMAR y del Grupo Hércules, hicieron el 13 de octubre de 2014, no existe registro alguno, tampoco fueron presentados ante autoridad alguna”, señaló la Comisión de Derechos Humanos:
“Ni hay ninguna investigación ministerial donde aparezcan como responsables, mucho menos orden de aprehensión o presentación girada en su contra”.
Los investigadores de la CNDH indicaron que encontraron a algunos hombres en prisión, que también reportaron que fueron arrestados por los marinos el mismo día que las cuatro personas desaparecieron.
Varios de ellos indicaron que fueron trasladados a un terreno baldío en el que fueron interrogados y golpeados, según el reporte.
Los reclusos declararon a los investigadores que en el terreno escucharon a tres personas con acento estadounidense y que en ocasiones se susurraban cosas en inglés. Un par de ellos dijeron que reconocieron a la cuarta víctima como una persona conocida en su vecindario, destacó el reporte.
La comisión señaló que los prisioneros también testificaron que en cierto momento llegó la alcaldesa (Lety Salazar) y les ordenó a la unidad Hércules que pusieran a los detenidos a disposición de la fiscalía. Y así ocurrió con los prisioneros, salvo los tres estadounidenses y su amigo que fueron asesinados.
Diez años después nada de justicia, Los padres de los muchachos, residentes de Estados Unidos de Norteamérica hicieron acto de presencia, allí donde ocurrió el secuestro, varios niños mostraron su inconformidad con cartulinas:
“No te queremos de alcaldesa (Lety), porque contigo no nos sentimos seguros…”, “Justicia por los hermanos Alvarado”, “Pido justicia porque mi mamá ya no puede”.
Entristecida, según el reporte publicado en La Mera Mera, estación de radio local, doña Raquel Alvarado Rivera, aseguró que hace diez años nadie los ayudó, pero justicia es lo único que quieren.
Doña Raquel en aquel entonces acudió al centro de convenciones Mundo Nuevo, pero Lety, como alcaldesa, solo se rió de ella, pero ni la atendió: “yo solo quería que me diera la cara” —dijo con rabia contenida—.
Don Pedro Alvarado, explicó allí mismo que desde entonces solo lo declararon en un expediente y lo interrumpió su esposa, doña Raquel:
“El Día de Charro Day´s, fui a Brownsville, yo la espere, le dije asesina en una manta, que me diera la cara, pero Lety lo único que hizo fue poner polecías, para que me retiraran del lugar, no se le olvide que yo tengo fotos donde ella, es la jefa de Los Hércules”.
Tercia su esposo:
“Llegaron Los Hércules bien bravos a quitarnos los celulares porque tomamos fotos, nos empujaban y te quitaban los teléfonos. El día de los hechos cuando en un carro estaban los cuerpos”.
Allí en la protesta, una mujer dijo enojada:
“Cuando ella (Lety) estaba de alcaldesa admitió don Pedro, se perdieron muchos muchachos, las familias, los camionetas de nuestros hijos, estaban allá por la Avenida del Niño allá en Matamoros, de Luis Biasi y allí los desmantelaron, los muebles al corriente y allí hay fotos de Alfa la agencia aduanal, estaba pintada de azul”.
Las familias encabezadas por los padres de las víctimas de Los Hércules, formados cuando era alcaldesa Lety Salazar, planean venir a Matamoros, a la plaza, para seguir exigiendo justicia y decirle a la candidata que con qué cara pide un voto, si sus Hércules mataron a sus hijos.