Elementos del Ejército Mexicano desactivaron una granada de fragmentación que había sido abandonada […]
Elementos del Ejército Mexicano desactivaron una granada de fragmentación que había sido abandonada en una camioneta blindada por sicarios que escapaban de autoridades en Tamaulipas. El incidente ocurrió antes de las 11 de la mañana en la carretera federal Reynosa-Monterrey, a la altura del fraccionamiento Privadas de la Hacienda.
La situación se desencadenó cuando policías estatales, al inspeccionar una camioneta Suburban, descubrieron la granada en su interior. De inmediato, solicitaron el apoyo del Ejército. Los soldados cerraron la circulación para que el personal especializado en artefactos explosivos pudiera realizar su trabajo de manera segura.
El abandono de la camioneta y la granada se produjo en medio de una serie de enfrentamientos y persecuciones entre la policía y sicarios durante la mañana del domingo. Los gatilleros, acorralados y temiendo ser abatidos, optaron por dejar el vehículo blindado con el explosivo dentro.
Después de un par de horas, la granada fue desactivada y llevada al campo militar para su resguardo.