En el cumpleaños número 60 del alcalde Mario Alberto López, La Borrega, el desdén de los regidores rebeldes de Morena, se vio reflejado con su ausencia y en una tarjeta de cumpleaños cargada de hipocresía y falsedad, cuando antes del divorcio, estos ediles hacían fila para llevarle detalles, al estilo de los gobernantes de la época del rey Salomón.
En el cumpleaños número 60 del alcalde Mario Alberto López, La Borrega, el desdén de los regidores rebeldes de Morena, se vio reflejado con su ausencia y en una tarjeta de cumpleaños cargada de hipocresía y falsedad, cuando antes del divorcio, estos ediles hacían fila para llevarle detalles, al estilo de los gobernantes de la época del rey Salomón.
Ahora desde un tarjetón, cada uno escribió un mensaje cargado de hipocresía y lleno de menosprecio, porque se negaron a ir en persona a partir el pastel y compartir de manera verbal sus buenos deseos.
Por ejemplo en la misiva, José Manuel Raygoza, redacta:
“Feliz cumpleaños bendiciones. Disfrute su cumpleaños vive hoy como si fuera el último día y así sea cada día”, pero eso lo escribió desde su escritorio en sala de síndicos y regidores cuando trabajaba en un tema de deportes.
Lo mismo hizo Rossy Pérez, quien le mandó a desear un “Feliz cumpleaños”, acompañado de una bendición, pero se negó a ir personalmente, porque asegura que para los regidores siempre el menú es huevo amarillo con jamón del Tutus.
En contraparte, la síndico Laura Cardenas, esa mañana del 17 de enero le llevó un detalle adornado con globos, y un pastel, así como buenos deseos en la tarjeta en el cual escribió muy sinceramente:
“Muy feliz cumpleaños alcalde y que Dios siga bendiciendo tu vida por muchos años más”.
Mientras que Ismael García, Andrés Andrade, Jorge Aguirre, Leticia Sierra, Ana Laura Martínez, Alejandro Cerezo, Mayra Sámano, Laura Cárdenas, Jorge Rentería, Iván Puente y Héctor Silva festejaban con el alcalde en la sala Benito Juárez; Alba Belen Aguilar, Alma Alarcón, Rosy Pérez, Juana González, Minerva Mata y José Manuel Raygoza trabajaban a manera de desprecio.
En la tarjeta también hubo mensajes de quienes sí asistieron al festejo, como el caso del panista Ismael García Ramos quien le dijo sobreponiendo a Dios por delante: “Alcalde lo mejor de Dios para tu vida. Felicidades”.
En contraste, Andrés Andrade, un ateo reconocido, le aventó un ramillete de flores:
“Presidente, la vida es una constante, usted ha demostrado ser un guerrero. Andrés”.
A quien de plano le sobraron letras y tinta en su pluma, fue a la edil Alma Alarcón de Morena que esa mañana se meneaba muy feliz degustando una bolsa llena de fritangas y semillas, le escribió:
“Dios lo bendiga!!!”.
Los tiempo en donde los regidores rebeldes de Morena iban a felicitar al presidente, terminaron, ahora aseguran aplicar la misma técnica que el alcalde: una carta llena de buenos deseo, pero quien sí le festejó con bombo y platillo fue Jorge Garza Amaya, un líder de la zona rural que está muy agradecido con el jefe de la comuna.