Después del enfrentamiento en Nuevo Laredo, Tamaulipas, donde reportaron el fallecimiento de dos jóvenes y resultó que ahora son 5 al dispararles los militares, el presidente Andrés Manuel López Obrador sentenció que si se comprueba la responsabilidad serán castigados.

Fue la madrugada del 26 de febrero, cuando las redes sociales reventaron el caso, señalado a dos muertos y un herido, presuntos halcones y después que los militares casi son linchados, repeliendo el ataque a balazod en el barrio de la calle Méndez y Huasteca de la colonia Manuel Cavazos Lerma.

Estas son las versiones oficiales, con las que cuenta la Fiscalía General de la República (FGR), que para nada coinciden con los habitantes del barrio:

El informe de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), expone que aproximadamente a las 04:50 horas del domingo 26 de febrero, el personal militar de una Base de Operaciones desplegado en Nuevo Laredo, Tamaulipas, hacían un reconocimiento en el área, cuando oyeron disparos de armas de fuego, poniéndose en alerta:

Minutos después, avanzaron a la dirección donde se escucharon las detonaciones y posteriormente, identificaron un vehículo pick up con siete individuos a bordo, quienes se trasladaban a exceso de velocidad con las luces apagadas y sin placas.

En el informe ya lo tiene en su poder el general Luis Cresencio Sandoval González, jefe de la Sedena que también pidió la intervención de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos para que se investigue el caso.

Del informe se desprende que los jóvenes al observar la presencia de las tropas, aceleraron la velocidad, de manera intempestiva y evasiva, deteniendo su marcha al impactarse después con un vehículo que estaba estacionado.

“Por ello, el personal militar accionó sus armas de fuego. De manera preliminar encontraron a una persona ilesa, una herida y cinco personas sin vida”.

Al herido se le proporcionó la atención médica, solicitando el apoyo de una ambulancia para ser evacuada.

Pese a lo que vímos en los videos que reventaron por las redes sociales, donde se ven jóvenes con pantalones debajo de la cadera, mal vestidos tatuados, incluyendo mujeres golpearon a los soldados, en el informe nada se registra del enfrentamiento a golpes.

Pero resultó que horas después de los hechos, eran cinco los jóvenes que fallecieron por heridas mortales de bala, siendo identificados como Gustavo Ángel Pérez Beriles, Wilberto Mata Estrada, Jonathan Aguilar Sánchez, Gustavo Ángel Suárez Castillo (estadounidense) y Alejandro Trujillo Rocha.

Según los familiares de las víctimas, Gustavo Ángel era el conductor de la camioneta y el encargado de llevar a sus compañeros a sus domicilios, que habían salido de un antro tras divertirse.

Al llegar a la calle Méndez y Huasteca, los militares les dispararon en al menos 20 ocasiones. Al interior de la camioneta quedaron los cuerpos de tres de los jóvenes, dos más en la calle, pro nadie explicó en qué momento se bajaron o los bajaron del vehículo.

Uno de ellos terminó en la banqueta de la calle Méndez esquina con calle Huasteca, que recibió un impacto en la pantorrilla derecha y otro más en la parte baja de la espalda.

Otro muchacho más fue hallado en la banqueta de la calle Huasteca con Méndez, presentando lesiones en el brazo izquierdo, estómago y una más en la espalda. Vecinos del lugar, cuyos nombres se reservaron, aseguraron que los dos jóvenes aún estaban vivos y los militares los llegaron a rematar.

Los otros tres jóvenes que quedaron al interior de la camioneta presentaron diversas lesiones provocadas por arma de fuego, rostro, clavícula, brazos y cabeza, entre otras que les provocaron la muerte. Alli mismo, no se encontraron armas.

Por su parte la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) dio a conocer que inició una queja de oficio por los acontecimientos ocurridos el pasado domingo 26 de febrero en la colonia Manuel Cavazos Lerma, en Nuevo Laredo, Tamaulipas.

En conferencia de prensa matutina a finales de febrero, Andrés Manuel López Obrador dijo:
“Conozco el caso, se nos informó en el gabinete de seguridad y a propuesta del secretario de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval González, se pidió a intervención de la CNDH para que se investigue el caso.

Tranquilo AMLO sentenció:

“Debe de quedar muy claro que este no es el gobierno de Fox o de Calderón no es mátalos en caliente, aquí se respetan los derechos humanos de verdad”.