El ex gobernador de Chihuahua, César Duarte, quedó vinculado a proceso por el delito de uso de recursos de procedencia ilícita, la resolución fue emitida por un juez federal durante la continuación de la audiencia inicial celebrada el fin de semana, con ello se activó un nuevo capítulo judicial contra quien encabezó el gobierno estatal entre 2010 y 2016.

En la misma diligencia, la autoridad judicial fijó un plazo de seis meses para la investigación complementaria y ordenó su reclusión en el penal del Altiplano, en el Estado de México, decisión adoptada pese a que el ministerio público federal había solicitado un periodo menor, el juzgador avaló la ampliación a petición de la defensa.

De acuerdo con la Fiscalía General de la República, entre 2012 y 2016 se habría diseñado un esquema financiero a través de dos empresas vinculadas directamente al ex mandatario, mediante estas razones sociales se desviaron cerca de 96 millones de pesos provenientes de un programa de apoyo al campo administrado por la Secretaría de Hacienda de Chihuahua, de ese monto, 73 millones habrían sido transferidos de manera dolosa a cuentas de compañías donde Duarte figuraría como accionista mayoritario.

Posteriormente, los abogados del ex gobernador intentaron frenar la vinculación al argumentar deficiencias en la investigación, sin embargo, la jueza responsable consideró suficientes los datos de prueba y resolvió mantener el proceso en curso, además ordenó su permanencia en el Altiplano, aun cuando Duarte se encontraba bajo prisión domiciliaria con brazalete electrónico por un proceso distinto relacionado con peculado que sigue abierto en Chihuahua.

La Fiscalía General de la República informó que la detención ocurrió en Chihuahua alrededor de las 14:00 horas, cuando el ex funcionario salía de su domicilio, la captura derivó de una orden de aprehensión emitida el 16 de mayo de 2024 por un juez de control del Centro de Justicia Penal Federal con sede en Almoloya de Juárez, Estado de México.

Este proceso se suma a una ruta judicial que inició en julio de 2020 con su detención en Miami, Florida, tras permanecer prófugo, después fue extraditado a México en 2022 para enfrentar cargos por peculado y asociación delictuosa, además, la autoridad federal precisó que el 4 de octubre de 2024 solicitó a Estados Unidos autorización para procesarlo por un delito distinto, aval concedido el 4 de diciembre de 2025, mientras continúan las indagatorias por irregularidades en subsidios al campo y operaciones inmobiliarias que mantienen a Duarte bajo el foco penal.