La inseguridad en la frontera de Tamaulipas cobró la vida de Horacio López […]
La inseguridad en la frontera de Tamaulipas cobró la vida de Horacio López Peña y la de Antonio de Jesús Céspedes, adultos de 75 y 74 años, tras la detonación de un artefacto explosivo del crimen organizado en la carretera San Fernando a pocos kilómetros del Barrancón del Tío Blas.
La bomba detonó durante la mañana del viernes, 31 de enero, mientras Horacio y Antonio, el primero del Ejido Santa Rita y el segundo residente de Brownsville, Texas, circulaban por la carretera San Fernando, en una camioneta Ford F-150, junto con una mujer identificada como Ninfa Griselda Ortega, de 50 años, que resultó gravemente herida.
A través de redes sociales la vocería de seguridad confirmó el hecho, al lugar unidades de emergencia y agentes ministeriales se trasladaron para asegurar la zona, ahí encontraron la camioneta de las victimas totalmente destruida con los dos adultos muertos y la mujer herida, que fue auxiliada por paramédicos y después trasladada al Hospital General de San Fernando.
Este hecho se suma a las dos detonaciones recientes de artefactos explosivos que han afectado a los pobladores en la frontera de Tamaulipas, la primera, una mina en la brecha de Río Bravo que destruyó una camioneta de CONAGUA y el segundo caso más reciente, un tractor agrícola que estalló.
El 27 de enero, el consulado de los Estados Unidos en Matamoros, emitió una alerta nivel cuatro, advirtiendo a la comunidad y a sus ciudadanos a tener cuidado de transitar de noche por esta región ante el riesgo de secuestros, balaceras y el peligro de explosivos artesanales.
Tras el recorrido del gobernador morenista, Américo Villarreal Anaya, por la frontera de Tamaulipas, indicó que los cuerpos de seguridad se reforzarían para combatir todo acto de violencia en la región, sin embargo, hasta hora los ciudadanos locales y no locales sufren por esta inseguridad.