La decisión del voto de quien va a dirigir el rumbo de Altamira los próximos tres años, está dividido en el domicilio 506 B de calle Graciano Sánchez, entre Alfredo Vbonfil y calle Reforma Agraria en el Ejido Francisco I Madero.
La decisión del voto de quien va a dirigir el rumbo de Altamira los próximos tres años, está dividido en el domicilio 506 B de calle Graciano Sánchez, entre Alfredo Vbonfil y calle Reforma Agraria en el Ejido Francisco I Madero.
Don Álvaro el jefe de la casa apoya al panista Ciro Hernández Arteaga y la señora Gabriela Pérez Sánchez la patrona va con Armando Martínez Manríquez candidato de Morena a la alcaldía.
En el Ejido que se ubica a la entrada que se conoce como “el 20” tiene las mismas necesidades desde su fundación, falta de pavimentación, fallas en la electrificación y promesas de candidatos de regularización para escrituración, allí las familias se encuentran en el olvido por el gobierno municipal, estatal y federal.
La señora Gabriela lleva ventaja, le dijo al que esto escribe, después de que le regalo dos mangos manila que el nortazo tumbo: “nombre mijo… mi esposo es flojo no va a votar el día de elección, me dijo ‘tu deja la lona (de Ciro) allí, para que no nos quiten la despensa'”.