Leonardo “N” y Sergio “N”, son dos policías municipales de Nezahualcóyotl, que enfrentan cargos de tentativa de homicidio calificado, luego de disparar contra tres jóvenes en el estacionamiento del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), durante la balacera que se desató el miércoles 9 de agosto, al mismo tiempo, la administración del complejo aeroportuario ya alista una denuncia penal.

Fue durante una audiencia llevada a cabo la tarde del miércoles 16 de agosto en el Reclusorio Oriente, que un juez de control determinó la imputación de los dos servidores públicos, mantuvo la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa y fijó tres meses para concluir la investigación complementaria.

De acuerdo con los primeros reportes de las autoridades, los dos elementos de la policía municipal realizaron varias detonaciones en la Terminal 2 del AICM, cuando perseguían a tres presuntos delincuentes, una mujer recibió un impacto en la cabeza, otro joven resultó herido en el brazo y una tercera víctima resultó ilesa, fueron tres días después, el 12 de agosto, que se dio a conocer que la chica identificada como Gabriela, de 20 años de edad, fue diagnosticada con muerte cerebral por la bala.

Por estos hechos, el Ministerio Público de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) también buscará reclasificar el delito como feminicidio.

Mientras que el padre de Gabriela, Hugo Alejandro Piña, comentó en una entrevista para medios de comunicación locales, que en la audiencia los uniformados explicaron que dispararon porque los tres jóvenes iban armados.

“Yo hablé con una de mis hijas y dice que no, que no llevaban nada de armas, que esas son mentiras y ¿de dónde van a sacar armas?, ellos no tienen armas”, dijo el padre de la joven, quien precisó que Gabriela y sus acompañantes venían de una reunión familiar.

Los agentes del Ministerio Público tampoco encontraron pruebas de que los jóvenes portaran armas, solamente se encontraron en el lugar de los hechos, un total de cinco casquillos percutidos calibre 9 milímetros.

Por su parte en un comunicado el AICM destacó que después de la balacera ofreció la ayuda necesaria a los heridos y a los usuarios, activando los protocolos internos de seguridad en coordinación con las autoridades.

Además, subrayó que elementos de la Semar, en coordinación con la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), brindaron de inmediato protección y vigilancia al recinto aeroportuario.