Después de cuatro meses que salió del penal, sin resentimientos, disfrutando la libertad, vive el exgobernador priísta de Tamaulipas, Eugenio Hernández Flores, Geño, de acuerdo con una carta que se difundió en redes sociales, en tanto su esposa Adriana González Lozano, libre como gaviota, espera que alguien se interese en la venta de 120 millones de pesos por su mansión del exclusivo Puerto Cancún, privada Punta Kalia.

Susana Hernández, hermana del exmandatario, que acaba de renunciar a su candidatura por Morena, compartió la misiva firmada por Geño en vísperas de Navidad, desde su cuenta de Facebook, mientras Adriana su cuñada, sigue viviendo en el glamour, con palmas borrachas de sol:

“Todo esto lo tomé como una enseñanza y no guardo ninguna clase de resentimientos, me siento liberado y en paz, ya que decidí dar vuelta a la página y perdonar a las personas que me ofendieron o hicieron algún daño”.

Geño plasmó que se siente profundamente agradecido por el apoyo que recibió durante los casi seis años que estuvo privado de la libertad, en tanto Adriana, con un diminuto bikini rojo con su escultural figura como Diana, La Cazadora se tocó el corazón, porque la residencia de ambos está valuada en 6.5 millones de dólares, pero la ex presidenta del Sistema DIF Tamaulipas, colocó una oferta de 5.8 millones de dólares.

La carta de Geño continúa en su redacción fechada el 22 de diciembre:

“Fue una experiencia muy dura para mí y mis seres queridos, que me llevó a una etapa de reflexión y transformación. Hoy aprecio y valoro muchas cosas que antes daba por hecho en mi vida, sobre todo la libertad, la naturaleza, el aire libre, el amor de mis seres queridos y amigos, así como el cariño y el aprecio de tanta gente que se hizo presente en estos difíciles momentos.

Pero allá en Cancún ondea la bandera de la impunidad en la mansión de Geño y Adriana, que para envidia de todas las inmobiliarias, consta de un sótano con garage para 9 vehículos; lavandería, patio de tendido cuarto de servicio y bodegas.

En la planta baja además del vestíbulo, está la cocina integral, despensa, sala-comedor, recámara de visitas con baño completo y vestidor, así como un Family Room.

Tras descubrir la importancia del amor, según Geño, reinició su vida con el propósito de hacer el bien aunque aún hay temas pendientes con la justicia, mientras en Cancún, la fastuosa residencia hay una terraza exterior con jardín y baño; así como alberca/jacuzzi y muelle privado para recibir embarcaciones de hasta 60 pies.

Finalmente en la planta alta hay cuatro recámaras, cada una con baño completo y vestidor; además de que la recámara principal tiene terraza con cuarto de seguridad; sala tv; clóset para blancos y ducto para la ropa sucia, aunque en la carta de Geño sigue redactando que se siente muy afortunado de tener una nueva oportunidad de vida, aun con asuntos por resolver, pero confiado en la justicia, seguro de salir avante y con la frente muy en alto.

Con el espíritu navideño dentro, Geño escribe en su último párrafo:

“Agradezco profundamente sus oraciones, sus visitas, sus buenas intenciones, los detalles que me enviaron, sus cartas de solidaridad, sus atenciones con mis hijos y con mi familia”.

La madrugada del sábado 26 de agosto Geño, para los tamaulipecos y El Güero, para sus amigos del penal de Tenango del Valle, Estado de México, quedó libre, pero Estados Unidos de Norteamérica lo reclama.

Geño fue detenido el 6 de octubre del 2017, durante la administración del panista gobernador Francisco García Cabeza de Vaca. La captura se hizo en Ciudad Victoria, capital de Tamaulipas, antes de un paseo en motocicleta.

Se le acusó de enriquecimiento ilícito por 40 millones de pesos, aunado a que enfrenta un proceso de extradición a Estados Unidos a petición de una corte de Texas, por asociación delictuosa y lavado de dinero del Cartel del Golfo.
Aunque la Fiscalía General de la República (FGR) cuestionó la libertad de Eugenio Hernández, nunca se ha tenido conocimiento de recursos de impugnación:

“Es mi deseo de corazón que estés leyendo esta carta en un ambiente familiar, de amor, paz y felicidad en esta hermosa época navideña y que el año nuevo y todos los que vengan, traigan muchas bendiciones para ti y para toda tu estimada familia y seres queridos”, firma Eugenio Hernández Flores, exgobernador de Tamaulipas.

Los documentos catastrales del Ayuntamiento de Benito Juárez, Quintana Roo registran la exótica mansión con la clave de Geño y Adriana: SM ZT 27 LUC 69-2-71 INT C1, que tan caro y exclusivo es, que solo 9 residencias de este tipo se fincaron en Cancún.

Punta Kalia le da la bienvenida a un estilo de vida de privacidad, exclusividad y lujo con hermosas áreas comunes, piscina, cancha de paddle, salón de juegos, gimnasio, que disfrutó Geño antes y ahora después de su detención.

Además, Puerto Cancún es un espléndido desarrollo náutico que ofrece un campo de golf de categoría profesional, una marina de mega yates, un centro de negocios y un club de playa privado, que allí se reúnen los muy amigos de Geño y Adriana por el momento.

Con ese calor propio del caribe, Geño con su coco con ginebra disfruta de su libertad, sol y sombra, con la arena blanca blanca, fumando una pipa, como símbolo de poder