La operación duró escasos 20 minutos, bajaron de una ambulancia vestidos de militares y con los cuernos de chivo por delante penetraron la instalación de la Policía Ministerial frente a los agentes del Estado, que con manos caídas observaron como 30 sicarios, blindados hasta los dientes, se llevaron al capo José Alfredo Hernández Campos, El Comandante Calamardo o El Metro 27, a quien el Grupo de Operaciones Especiales (GOPES) lo había capturado la madrugada del lunes 12 de julio, en un bar de Díaz Ordaz…
La operación duró escasos 20 minutos, bajaron de una ambulancia vestidos de militares y con los cuernos de chivo por delante penetraron la instalación de la Policía Ministerial frente a los agentes del Estado, que con manos caídas observaron como 30 sicarios, blindados hasta los dientes, se llevaron al capo José Alfredo Hernández Campos, El Comandante Calamardo o El Metro 27, a quien el Grupo de Operaciones Especiales (GOPES) lo había capturado la madrugada del lunes 12 de julio, en un bar de Díaz Ordaz…
En su retirada tras cumplir al pie de la letra su cometido, el comando fuertemente armado, bajó de los vehículos a las personas que por allí transitaban para robarles el vehículo e huir entre las calles de Reynosa. En el camino arrojaron estrellas poncha llantas, para impedir que las fuerzas armadas les dieran alcance, sin embargo, los GOPES y el Ejército Mexicano ya los seguían de cerca en un operativo desplegado en puntos estratégicos de la ciudad.
Durante la operación, los agentes del Estados y militares se enfrascaron en un tupido enfrentamiento contra dos ocupantes de un coche que los recibieron a balazos, pero uno de ellos perdió la vida, mientras que el otro hombre fue detenido; ambos portaban ropa camuflada, equipo táctico y armas de alto calibre, así como identificaciones de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Fuentes extraoficiales señalan que El Comandante Calamardo o El Metro 27 junto a sus cómplices del narcorescate huyeron a Díaz Ordaz en donde el capo tiene su feudo criminal como segundo al mando de Los Metros, que lucha por el control en la región de La Ribereña.
El capo había sido detenido por agentes de Los GOPES en Díaz Ordaz, pero fue puesto a disposición de la Fiscalía General del Estado en Reynosa a donde a eso de la 19:00 horas del martes 13 de julio arribó un comando armados a rescatar a su patrón frente a los agentes del estado que con las corvas temblorosas permitieron el rescate de El Comandante Calamardo.